La importancia de la transversalidad en la recuperación de un juego
Lo más divertido de los bolos son las partidas entre amigos, pero los concursos también están muy bien porque creas lazos con los pueblos vecinos. Son necesarios cualquiera que sea su formato, pero si pensamos en recuperar un juego que está necesitado de oxígeno, es muy importante que potenciemos, al menos en algunos torneos, el concepto de TRANSVERSALIDAD (hombres, mujeres, niños, ancianos, jugadores y no jugadores) con objetivos claros que calen en la gente. Por ello, aparte del tradicional campeonato de bolos de las fiestas del mes de julio, celebramos en el pueblo de Quintanilla del Rebollar otro concurso: "Brazo Largo", en el mes de agosto, en el que desarrollamos este concepto buscando que un niño pueda aprender de un maestro anciano o que un joven inexperto tenga la oportunidad de vencer a un campeón reconocido.
Claves:
El campeonato es "difícil" para los grandes jugadores (no pueden llevar sus bolas y el mico se coloca en el centro pero solo vale si es derribado por los bolos).
Hacemos seis categorías diferenciadas y practicamos la discriminación positiva con aquellas mujeres, niños o ancianos que quieran participar en la categoría absoluta.
Todo lo que se recauda se sortea en bolas de madera como premios entre todos los participantes (campeonato sostenible).
Por la victoria en tu categoría recibes un trofeo artesano y el aplauso del público. Recuperamos, de esta manera, el espíritu olímpico de la Antigüedad cuando los ganadores no recibían premios materiales, sino el honor y la gloria.
En agosto de 2015 tiraron ochenta y cuatro personas. Había buenos jugadores, pero a pesar de ello, quien más bolos hizo entre todos los participantes fue Patricia: ¡una niña de 13 años!
Óscar Ruiz, mayo 2016.