Por razones ajenas a nuestra voluntad, el Club Bolera Merindades se ve obligado a cerrar sus instalaciones y nos gustaría, a ser posible, que algún pueblo o ayuntamiento de las Merindades, pudiera aprovechar nuestra estructura de chapas de acero, en perfecto estado, para conseguir hacer una bolera de gran calidad, "eterna", de una manera totalmente gratuita.

Se trata de un conjunto de 11 chapas de acero S275 como se ve en la imagen. Encargarlas de nuevas, al precio que está el acero, rondaría en la actualidad, aproximadamente unos 5000 €. Sus dimensiones en metros son:

8 chapas de acero de 1 cm de grosor:

 0,635x2,96 m (2 chapas).

 1,60x2,96 m (1 chapa).

 4,38x0,12 m (2 chapas).

 4,38x0,70 m (2 chapas).

 2,87x0,41 m ( 1 chapa).

3 cureñas de acero de 2 cm de grosor:

 4,38x0,40 m (3 chapas).

Y precisando más detalles en milímetros, las cureñas tienen un grosor de 20 mm, descansan sobre una goma dura de 5 mm encima del cemento pulido (sobre dicha goma dura hay un suplemento de espuma de 2 mm tan suave que se puede romper con la mano, pero cuya función es evitar que las bolas boten en exceso). Las chapas restantes son de 10 mm sobre una goma de 15 mm para igualar las alturas. El conjunto de 11 piezas tiene 2900x7700 mm (3 cureñas+ 8 chapas) y se encaja como un puzzle  dentro de un ángulo, incrustado en el cemento, de 25 mm. De esta manera la bolas no sufren y se cubre toda la superficie de riesgo de posible daño para las mismas. 

Si esta oferta gratuita la hubiéramos hecho en los años 80, tendríamos sin duda una cola de pueblos interesados. Hoy, sin embargo, es una incógnita. En cualquier caso, recordad que no basta con hacer boleras nuevas o renovar las antiguas, sino que lo fundamental es enseñar a los niños a jugar en ellas para que no se pierda este rico Patrimonio Cultural Inmaterial que tenemos en las Merindades.

Óscar Ruiz, septiembre 2022.

Esperanza

Hace casi dos meses ofrecíamos, gratuitamente, un conjunto de chapas de acero para ser empleadas en hacer una bolera "eterna", de gran calidad. Lo publicamos en esta misma página así como en las redes sociales, y contrariamente a lo que pensábamos, se han interesado en las mismas varios pueblos y algún ayuntamiento: Escaño, Noceco, Virtus, Panizares, Población de Valdivielso, Soncillo, Valderrama, Nofuentes, Valle de Mena y Cillaperlata. Incluso las querían en algún pueblo de fuera de las Merindades, pero también de la provincia de Burgos, como Villegas, Villasandino o Tórtoles de Esgueva. 

Al final, las once chapas viajaron el 10 de noviembre a Soncillo. Este pueblo del Valle de Valdebezana cuenta con el centro educativo Rosa Chacel, en donde tienen unos treinta niños entre seis y doce años, edades ideales para iniciarse a jugar a este deporte tradicional tan entrañable y propio de nuestra comarca. Como han manifestado una verdadera voluntad de enseñarlos, lo hemos escogido más allá de que fuera uno de los primeros que demandase  las chapas con gran interés. 

¡Hay esperanza! 

Óscar Ruiz, noviembre 2022.